El clima de supuesto consenso que rodeaba a dicho régimen dictatorial y oligárquico empezó a trastocarse con la remoción del General Eduardo Lonardi al mando de la misma en noviembre de 1955. El "ni vencedores ni vencidos" que éste último había proclamado a la sociedad fue reemplazado por una represión brutal y sangrienta contra todo lo que oliera al "régimen depuesto" el 16 de septiembre de 1955. El Partido Peronista fue disuelto, la CGT intervenida, sus delegados y dirigentes presos y torturados, al igual que milies y miles de obreros. La Fundación Eva Perón fue virtualmente desmantelada y destruida, y el cadáver de la Abanderada de los Humildes secuestrado de la CGT por un comando militar. La represión, la desnacionalización de la economía y la vuelta a los estamentos más altos del gobierno de personajes de la oligarquía y de "argentinos" asociados a corporaciones extranjeras, un hecho trágico.
Ante tanta ignominia y con el General Juan D. Perón exiliado forzozamente, el General Juan José Valle se convirtió en el jefe del movimiento nacional en operaciones. La dictadura "Libertadora" de Aramburu y Rojas conocía gran parte del plan de levantamiento armado a través de sus servicios de inteligencia, que debía comenzar con una proclama radial del General Valle la noche del 9 de junio.
El fracaso del improvisado putchs trajo como consecuencias trágicas el fusilamiento y asesinato de obreros en José L. Suárez y de militares en Lanús, La Plata, Campo de Mayo previa sanción de la ley marcial por la dictadura militar oligarco-imperialista. El General Juan José Valle, ante la dramática situación, decide entregarse para parar las matanzas con la promesa que se le respetará su vida. Pero como los dictadores al servicio de intereses imperiales no tienen palabra ni códigos éticos, por decreto de Aramburu-Rojas (el dúo sangriento) el General del Pueblo (Valle) es fusilado el 12 de junio de 1956 en la antigua Penitenciaría de la calle Las Heras, ante el ruego desesperado de la esposa e hija del patriota e infortunado General que entregó su vida a la causa de la democracia para el pueblo y por el regreso del General Perón a su patria.
General de División Juan José Valle, Teniente Coronel José A. Yrigoyen, Teniente Coronel Oscar Lorenzo Cogorno, Coronel Eduardo Cortínez, Coronel Ricardo Ibazeta, Capitán Néstor Cano, Capitán Jorge Costales, Capitán Eloy Caro, Dante Hipólito Lugo, Clemente Ross, Norberto Ross, Osvaldo Albedro, Carlos A. Lizaso, Nicolás Carranza, Francisco Garibotti, Mario Brión, Vicente Rodríguez, Teniente de banda Néstor Videla, Teniente 1º Jorge L. Noriega, Sargento Hugo Quiroga, Suboficial principal Miguel Angel Paolini, Suboficial principal Ernesto Garecca, Cabo músico José M. Rodríguez, Sargento músico Luciano Rojas, Sargento ayudante Isauro Costa, Sargento carpintero Luís Pugnetti, Subteniente de Res. Alberto Juan Abadíe.
¡PRESENTES!
Eduardo N. Canosa