Se repartieron volantes que expresan las problemáticas generales de los barrios más comprometidos de un distrito en manos de un gerente “postmoderno”. A su vez la actividad estuvo acompañada de una bandera que indica el lanzamiento político de la candidatura, pintadas y material de lectura.
En esta etapa de la campaña se plantea la divulgación del candidato y su programa político interpretando los huecos reales que deja el macrismo en su ajuste despolitizador en las zonas que más sufren su influencia.
Los militantes del MUP de La Boca, a cargo de la organización de la campaña expresaron que "ya es momento de pasar a una segunda etapa cuyo objetivo era trasladar esas mismas problemáticas sociales al centro del escenario político con la idea de profundizar esa llamada de atención que desde hace tiempo y desde las entrañas del campo nacional y popular se intenta transformar en un despertador ideológico de una clase media adormecida".