Compañeros y compañeras:
El gobierno nacional ha dado sobradas muestras de gobernar para los sectores trabajadores y para los humildes de la patria y nosotros como movimiento político que construye este proyecto y lo sostiene en cada hecho cotidiano apoyamos y acompañamos a la Presidenta y conductora del proyecto nacional y popular, Cristina Fernández de Kirchner.
Desde el 2003 vemos la alegría de nuestros compañeros y compañeras que por primera vez cuentan con un trabajo digno, con una vivienda, una vereda, o con agua corriente, hechos que apuntan nada más y nada menos que a mejorar la calidad de vida del primero al último de los argentinos y a recomponer las esperanzas sabiendo que el cambio es posible.
Luego de años de desidia y abandono de las clases populares, de marginación y pobreza extrema, dos gobiernos democráticamente elegidos se han propuesto poner el Estado a la cabeza para solucionar los problemas de su pueblo y avanzar estratégicamente en sintonía con el proceso de cambio que se vive en América Latina.
También tenemos bien presente que después de 30 años de desmantelamiento del Estado, de venta de las empresas nacionales, de regalar los recursos naturales que nos pertenecen a todos y de que se gobernara para el bolsillo de unos pocos, no es sencilla la tarea de reconstruir el país. La distribución de la riqueza y el cuidado estratégico de nuestros recursos toca los intereses de corporaciones económicas, de los representantes de la vieja política y de los medios de comunicación que darán la batalla para impedir que el proceso de transformación de la argentina avance, porque ellos no quieren distribuir la riqueza ni quieren un país igual para todos. Quieren seguir obteniendo ganancias extraordinarias a costa del desmantelamiento de la Nación y defender una democracia a la medida de dichos intereses.
Por eso reconocemos que queda mucho por hacer y comprendemos que esto sólo se logra con una acumulación de poder suficiente para enfrentar los nuevos desafíos y por eso es necesario el compromiso y participación y ahí está también nuestra responsabilidad, nuestra tarea como militantes, como pueblo que defiende sus conquistas.
Para demostrar que el pueblo está de pie, que está organizado y no va a dar un paso atrás es que nos convocamos el domingo 1º de marzo al Congreso de la Nación, a la apertura de las sesiones legislativas en la que nuestra presidenta Cristina Fernández de Kirchner dará el discurso inaugural. Para ese día debemos estar presentes con toda la fuerza y la mística que nos caracteriza.