EL MUP Capital estuvo en la presentación del sitio web infojus.gov.ar por parte de Cristina

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Muchas gracias, muy buenas tardes a todos y a todas, bueno fundamentalmente que hoy hay muchos colegas, muchos abogados, un peligro todos juntos muchos somos hoy; decanos; titular de la FACA, la Federación Argentina de Colegios de Abogados; académicos: creo que estamos en un momento muy importante. Yo recién, cuando Julián nos hablaba desde Jujuy, de los Centros de Acceso a la Justicia, me vino a la memoria – oltri tempi- décadas atrás cuando en las facultades de Derecho teníamos las famosas consultarías barriales, que eran otra cosa, que era también el acceso de la gente a la Justicia, estudiantes de Derechos que concurríamos a los barrios más humildes, que no podía por allí a acceder a contratar los servicios de un Abogado e íbamos como estudiantes y como militantes, fundamentalmente, a desarrollar y hacer conocer el Derecho.

 Esto que pareciera ser un sistema únicamente para Abogados, estamos hablando de una digitalización, en estos momento en que yo estoy hablando ya entró on line el sitio, o sea que ya no es solamente una cuestión que está vinculada a lo académico, a lo profesional, a los estudiantes, a las facultades, obviamente tal vez sean los que más se vayan a servir, es un universo de aproximadamente – entre funcionarios municipales, nacionales, estudiantes, colegios de Abogados – de medio millón de personas muy vinculadas con esto. Pero en realidad esto es un acceso que lo tiene toda la población y que además se complementa con la otra tarea que hicimos del Digesto, esto es del reordenamiento que había sido decidido por los Constituyentes del 94, pero que recién lo cumplimentamos nosotros con personal nuestro.

 Y esto también tiene su origen, este sistema que a diferencia de otros que hay en el mundo, que algunos son integrales y otros son gratuitos, pero ninguno… es el primer país en el mundo en que es integral y gratuito, y es aquí en la Argentina. (APLAUSOS).

Eso hay que decirlo; por ejemplo Francia – por así decirlo – lo tiene gratuito, pero no lo tiene integral; Italia lo tiene integral pero no lo tiene gratuito y acá estamos con las dos condiciones: integral y gratuito para acceder on line a todas las normas nacionales y provinciales vigentes en el país; a fallos a doctrinas y además también para subir artículos a la red, con lo cual realmente constituye un avance muy importante.

Ustedes saben que el antecedente inmediato de esto, que es el SAIJ, que había sido creado en la década de los 80, pero que era arancelado y además también era un circuito de acceso limitado porque había que tener una clave para poder acceder. Veo que también nos acompaña el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, a quien también agradecemos su presencia, que lo acabo de ver, del Servicio de Paz y Justicia. (APLAUSOS).

 Y creo que lo importante es el acceso que va a tener el pueblo también, la sociedad en su conjunto a esto.

 Hoy estábamos inaugurando un centro similar, al que vemos exactamente desplegado aquí, en el Colegio de Abogados de la provincia de Jujuy, y en la Facultad de Derecho de la querida provincia de Mendoza y calculamos que a fin de año vamos a tener una terminal en todas las facultades de Derecho públicas, por supuesto, de país, en los Colegios de Abogados también y en todas las provincias. (APLAUSOS).

 Así que en diciembre vamos a estar con este sistema presentes en todo el país; hoy ya on line para toda la sociedad y luego en los sitios como hemos enumerado.

 Esto es muy importante y también está vinculado con la modificación que hemos tenido en el acceso a Internet que tiene, por ejemplo, la población y que nos va a permitir que la Justicia no sea algo únicamente para abogados, sino para que todos los ciudadanos puedan conocer las normas, los fallos también de la Justicia y que muchas veces puedan seguir los fundamentos, que puedan leer porqué un juez toma una determinada decisión, va a ser muy interesante.

 Pero quiero leerles algo, que tiene que ver con las posibilidades que esto va a tener para toda la sociedad: en el año 2001, en el Censo, el 30 por ciento de los hogares argentinos tenía únicamente acceso a Internet, eran 2.065.362 hogares; de acuerdo con los datos del año 2010, los hogares son el 47 por ciento, casi el 50 por ciento de los hogares argentinos, son 5.719.185, el incremento ha sido del 177 por ciento de acceso a Internet. Yo creo que esta cifra, este dato – ustedes saben – fue tomado del Censo, del 27 de octubre, del año pasado – a ese momento se había entregado 116.000 netbooks del “Programa Conectar Igualdad”; al 15 de septiembre – al día de hoy – tenemos entregadas ya 1.283.589 netbooks. Hemos venido entregando un promedio por semana de 95.000 netbooks y vamos a terminar, en la primera semana de octubre, con 1.650.000 y yo creo que vamos a  llegar al 1.800.000, tal cual habíamos previsto a la finalización del ciclo lectivo en noviembre. Esto significa que estás cifra de hogares con acceso a Internet, que fue tomada prácticamente hace un año y que ya era del 47 por ciento, hoy día, tiene que ser inclusive mucho más alta.

 Yo leía el otro día, en Lanús, cómo había variado de julio a julio, el acceso domiciliario a banda ancha, a Internet y de julio a julio, del año pasado, había crecido el primero (el acceso a banda ancha) un 34 por ciento y un 31 por ciento el acceso a Internet, con lo cual, todo esto sumado a estas computadoras, que obviamente no se conecta solamente el niño, sino también su familia, nos colocan, creo, en un lugar privilegiado, en un lugar que hemos construido entre todos los argentinos y que nos permite tener acceso a la Justicia. 

Yo les decía que, además, el software que tenía el SAIJ, que había sido arancelado por un decreto del doctor Alfonsín en 1986, si mal no recuerdo, y que era muy limitado, hoy es un software absolutamente moderno. El software del SAIJ era de 1996; el que sirve de soporte al sistema que estamos poniendo on line hoy, es formulado por una pyme argentina y totalmente desarrollado e instrumentado por los funcionarios del ministerio de Justicia, o sea, del sector público, lo cual nos pone muy contentos, porque al igual que en otros sectores de la administración pública, estamos poniendo también la inteligencia del sector público, todos los recursos humanos y recursos económicos del sector público para mejorar la capacidad del Estado, que es también mejorar la capacidad de los argentinos.

 Muchas  veces se pensó que el Estado perjudicaba o finalmente era algo malo para los argentinos, pero nos dimos cuenta que estas ideas que se veían durante mucho tiempo trabajado sobre la cultura y sobre la mente de los argentinos, finalmente supimos que cuando el Estado se destruye o el Estado se excluye de la participación de la vida ciudadana, los principales perjudicados terminan siendo la inmensa mayoría de la sociedad.

 Así que, creo que no solamente es poner en marcha un sistema moderno, único en el mundo, integral y gratuito, reitero, que no solo va a beneficiar directamente a medio millón de usuarios que lo usan a diario, sino que, reitero, es algo que va a servir a toda la sociedad porque va a convertir a la ley y a la Justicia no en un mundo en el que solamente sea manejado por los académicos, los abogados o los magistrados, sino que democratiza el acceso a la Justicia, porque el que no sabe es como el que no ve, digo yo, y la posibilidad de ver, la posibilidad de leer, la posibilidad de hacerlo pulsando unas teclas de la casi hoy es de fácil acceso para todos, creo que contribuye a democratizar la Justicia.

 Ustedes saben la vieja historia desde el Bicentenario, de los futuros festejos del Bicentenario, uno de los sectores en el cual todavía nos debemos una reforma profunda. Pero no una reforma…muchas veces se dice “bueno, que tal cosa”. Yo siempre digo que hemos dado saltos cualitativos importantísimos porque, por ejemplo, en materia civil, seguimos rigiéndonos por el código que hizo Napoleón, que fue maravilloso en la época en que lo hizo Napoleón; el Código Civil Argentino es un código basado…bah, copiado, Vélez Sarsfield lo copió, vamos a decir con alguna cosa…Sí, claro, vamos a empezar a decir las cosas como son: es una copia del Código Civil francés con modificaciones y además del código napoleónico, que fue realmente una de las cosas más revolucionarias que hizo Napoleón, hizo muchas, es un personaje que a mí me gusta mucho, ya mañana me van a matar con esto de Napoleón, pero no importa, a mí me gusta, no importa, y no porque haya estado en Francia, a mí Bonaparte me gusta, es porque soy peronista. Siempre de cierta izquierda nos acusaban de bonapartistas, no te rías Beberrí, nos acusaron de bonapartistas, si nos acusaron de bonapartistas. Bueno, no importa, seremos bonapartistas, a mí la figura de Napoleón Bonaparte me parece increíble y bueno…

 Pero, en realidad, uno se sigue rigiendo por eso y dentro del código napoleónico, instituciones de derecho romano. Si uno piensa que estamos resolviendo conflictos en el siglo XXI con instrumentos, con procedimientos, con formas que devienen del código napoleónico y de códigos de procedimiento de principios del siglo XX, con normas anteriores del siglo XIX, es evidente que uno podrá tener los mejores magistrados, los mejores instrumentos, pero lo que hay que adecuar también son las normas para ponerlas en consonancia con el mundo contemporáneo.

 Esta es una reforma que nos debemos aunque no es solamente un problema de los argentinos, es un problema, sobre todo, de los derechos que, como el argentino, se basan fundamentalmente en sistemas de derecho escrito, no como el derecho inglés que es un sistema jurisprudencial de commun law, bueno, pero en fin…Esto es del derecho latino continental europeo, fundamentalmente, y creo que también tenemos que hacer algo en eso muy importante. Y también comenzar a trabajar sobre algunas instituciones que prevé la Constitución como el juicio por jurados, por ejemplo, algo que también tenemos que hacer.

 Yo había presentado un proyecto siendo senadora y después, bueno, quedó allí en aguas de borrajas y en algún momento sería bueno comenzar a repensar si podemos recuperar esa manda constitucional del juicio por jurados.

Pero lo cierto es que hoy estamos dando un paso muy importante, una contribución muy importante a la sociedad. Lo estamos haciendo desde el Estado, lo estamos haciendo también con la contribución de todos los profesionales que trabajaron en la reforma del SAIJ,  también en la reforma del Digesto y quiero agradecerles a todos los que de uno u otro modo colaboraron para que esto hoy pueda ser posible.

Me da mucho orgullo poner en marcha hoy un sistema que es único en el mundo, que lo hemos hecho aquí en la Argentina, que es nuestro y que es para toda la sociedad.

 Muchas gracias y muy buenas tardes a todos y a todas. (APLAUSOS)