Tanto Juan Bogado Gutierréz como Adrián Meza, los jóvenes del MUP Corrientes, se mostraron muy fortalecidos por la experiencia vivida en Córdoba, y ya coordinan con los tantos jóvenes que se referencian con ellos y con el MUP, en la política universitaria y barrial para profundizar una forma de vivir en la democracia, que es por intermedio de la militancia política.-
El Consejo Federal de Juventud nace como iniciativa del Poder Ejecutivo Nacional, bajo la orbita de la Dirección Nacional de Juventud, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social, con la intención de colaborar en el diseño, fortalecimiento y coordinación de políticas públicas de juventud nuevas y las ya existentes, constituyéndose como instrumento ágil, mediante la construcción de mapas estratégicos de gestión que posibiliten la reconstrucción del concepto de ciudadanía en los jóvenes de nuestro país.
El Consejo trabajará para la articulación de una agenda nacional de jóvenes, donde se consideren las problemáticas particulares y generales de cada región, promoviendo el debate genuino que permita un diseño de políticas públicas con consenso, desde un protagonismo federal, donde se articule el accionar del Estado nacional, los estados provinciales, locales y las organizaciones de la sociedad civil.
Juventud significa, entre muchas cosas, hallar el difícil equilibrio entre continuidad y ruptura: continuar las políticas profundizándolas y romper con las visiones arcaicas que suponen a la juventud como objeto. Cuando hablamos de juventud lo hacemos en situación histórica. Hablar de juventud es hablar de una experiencia histórica y generacional.
Hoy son jóvenes quienes nacieron durante el proceso militar, hoy son jóvenes quienes se criaron o nacieron también al calor de las promesas fuertes de la democracia, hoy son jóvenes quienes maduraron en la década del ’90.
En este sentido, se trata de recomponer la relación con lo público, lo estatal y lo político a través de foros y encuentros provinciales y regionales que permitan ampliar la agenda de gestión pública, que den mayores herramientas a las organizaciones juveniles, que detecten y estimulen las nuevas formas de participación colectivas.
Entendemos que la tarea de recomponer el tejido social no es sólo una tarea política estrictamente, sino que además es cultural y social. Se trata de formas culturales que hacen a lo político en tanto plantean el desarrollo de identidades colectivas. Porque la sociedad argentina cambió, desde hace 30 años, con la puesta en marcha del proceso de neo-liberalización, alterando su estructura social; y porque se ha iniciado en el país la puesta en marcha de la recuperación de sus fuerzas sociales y productivas.
La tarea de toda política pública (la de este Consejo, la de las direcciones de juventud, entre otras) podrá medir su eficacia en la capacidad de interpelar, hallar y estimular las nuevas formas de participación social que tienen a los jóvenes como protagonistas.
MUP CORRIENTES