El Ministerio de Desarrollo Social de la Naciónrealizó ayer el Encuentro de Comunicación Popular “Liberar la Palabra, democracia, medios y Proyecto Nacional”. El mismo se desarrolló en el aula tanque de la Universidad Nacionalde San Martín (UNSAM) y contó con la presencia del director de Comunicación en Red, Federico Martelli, el director de Capacitación, profesor Carlos Quique Álvarez, ambos del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación; el intendente local, Gabriel Katopodis; representantes del AFSCA y figuras destacadas del periodismo nacional.
El evento se efectuó en el marco del debate acerca de lo que sucederá el próximo 7 de diciembre cuando venza la medida cautelar impulsada por el Grupo Clarín. Tanto el “monopolio” como todos los grupos de medios deberán adecuarse a la Leyde Servicios de Comunicación Audiovisual sancionada por el Congreso en octubre de 2009.
El primer panel se debatió bajo la consigna “¿Qué pasará el 7 de diciembre, fecha en la que el Grupo Clarín deberá adecuarse al artículo 161 de la Leyde Servicios Audiovisuales?” y contó con la participación de la ex directora de Asuntos Legales de la Autoridad Federalde Servicios de Comunicación Audiovisual, Graciana Peñafort, el productor de Víctor Hugo Morales, César Ferri y la vicepresidenta del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO), Mariela Pugliese.
Por su parte, el segundo panel que tuvo como eje “La construcción de un sistema de medios plural y democrático en el siglo XXI” estuvo integrado por el intendente local Gabriel Katopodis, junto a Federico Martelli, Carlos Quique Álvarez y Pablo Llonto.
Además participaron del evento diversas agrupaciones sociales, cooperativas de trabajo, asociaciones civiles y medios de comunicación del conurbano bonaerense.
El Estado, las organizaciones libres del pueblo, los medios de comunicación y la sociedad en su conjunto, deben conocer y debatir los alcances de la nueva Ley y aportar a la construcción de un nuevo sistema de medios, plural, popular, nacional y democrático.
Segundo Panel
MARTELLI:
“Quisiera agradecer a todos por estar acá, primero a Gabriel Katopodis que es un compañero que siempre que hacemos algo en este distrito, sea desde el ministerio, la política, la comunicación o la cultura, nos acompaña. Tiene un compromiso absoluto con la causa del proyecto nacional y con la causa de la transformación y liberación de la patria, y además un compromiso político con la Dra. Alicia Kirchner por las políticas públicas que viene desarrollando el ministerio.
Por otra parte, a mi compañero del ministerio Quique Álvarez y un agradecimiento especial a Pablo Llonto, porque la verdad es que si hay un compañero en estos días que está sumamente ocupado en la defensa de la causa de los derechos humanos, en perseguir a los genocidas y sobre todo en la reparación histórica, que es una reparación política y ética de los compañeros, es Pablo Llonto. Así que agradezco profundamente tu presencia.”.
“El objetivo de esta jornada es renovar el debate sobre la ley de servicios audiovisuales y ver qué pasará con la pelea que viene a partir del 7 de diciembre, fecha en que el grupo Clarín debe adaptarse a lo que dicta la ley de la democracia y para que comience el proceso de desinversión y se transforme en un actor más de la comunicación. Porque a diferencia de lo que ellos plantean, que nosotros queremos que Clarín, TN o La Nación desaparezca, nosotros les decimos que estén en la grilla, que la oligarquía tenga su voz, su canal o su diario, pero no queremos que ese medio sea hegemónico, que ahogue otras voces y que desde ese medio trabajen para consolidar el poder. Porque hoy la comunicación no es como se conoció históricamente como el cuarto poder, hoy es el primero, que son las corporaciones que condicionan el desarrollo de nuestra democracia y por ende el de todos nosotros y nuestras familias”.
“Haber escuchado a César Ferri, Graciana Peñafort, a Mariela Pugliese de FARCO y la introducción que hizo Gabriel, nos pone en el debate y la reflexión de lo que está pasando en estos días y por qué son necesarios estos encuentros. Y porque quizá, en algún punto, luego de 3 años de la sanción de la ley- salvo dos o tres artículos en plena vigencia- quienes no están involucrados en la comunicación cotidiana pierdan de vista que hay que seguir siendo actores de esta pelea. Quizás la militancia, las políticas públicas o el vecino, pierdan de vista que todavía tienen que seguir siendo actores de la comunicación, que todavía hay que militar esta política, que todavía hay que hacerse cargo del desafío, no sólo porque haya un artículo que no está vigente o porque todavía exista un monopolio como el grupo Clarín, sino porque la comunicación es parte de la discusión central de la Argentina, que es la discusión del poder, político, económico, social y cultural. Cuando Cristina asumió el 10 de diciembre su segundo mandato, ella rescató de su discurso de asunción una nota que ese día había publicado Eric Calcagno y dijo “me gustó lo que dijo Eric, porque dice que mi gobierno se caracterizó por tres cosas: redistribuir la educación, la riqueza y la palabra, la comunicación” Fíjense que la propia Cristina pone en plano central el problema de la comunicación y del poder en la Argentina”.
“Graciana decía al principio que esta democracia había podido juzgar a las juntas, pero no había podido tocar la ley de radiodifusión de la dictadura. Precisamente porque terminada la doctrina de seguridad nacional, a los militares golpistas de toda América Latina se los pasó a un segundo plano, porque dejaron de ser necesarios para los centros de poder mundial, porque habían avanzado hacia una nueva fase que era la base del control a través de los mercados y a través de la comunicación. Por eso pudimos juzgar a las juntas, a tipos que habían sido todopoderosos en la dictadura. Y un tipo de gobierno débil como el de Alfonsín los pudo sentar en un banquillo, pero ni de casualidad se podía tocar la ley de radiodifusión de la dictadura, porque se había avanzado en una nueva fase”. Porque en el siglo XIX o XX, como decía Mao Tse Tung, el poder sale de la punta del fusil y en el siglo XXI, el poder sale de la TV, de la radio o internet. Es por eso que el poder que está en disputa, es la palabra”.
Si el poder y la palabra son lo que están en disputa, para nosotros tiene que ser tan importante como lo fue para nuestros viejos o abuelos el sindicato, su principal arma en la pelea por la distribución de la riqueza. Los viejos decían “el sindicato no se toca, porque a partir de la política yo construyo el poder de mi clase”. Ahora, a partir de la comunicación, sin dejar las unidades básicas, los gremios o centros de estudiantes, hay que agregarle una herramienta más que es la comunicación, que no puede quedar en manos de expertos o comunicadores, porque la comunicación es para ser tomada por el pueblo y la verdad es que las redes sociales y la democratización del acceso han ayudado mucho. Hoy uno entra en el facebook y son todos luchadores, aprendieron a utilizar el corel o el photoshop ridiculizando a Magnetto o a Larrata y la verdad que me llena de alegría que una ama de casa, un arquitecto o un estudiante, gente que no pasó por la facultad de periodismo o no están frente a un micrófono, son comunicadores también. Es por todo esto que de acá al 7 de diciembre tenemos que reconstruir la mística previa al 10 de octubre de 2009, no creyendo que el 7 de diciembre se termina el grupo Clarín, esto va a ser mucho más largo”.
“Hay una modificación en el estatus jurídico de la situación. A los poderes se los vence con contrapoderes y el poder del grupo Clarín se lo vence construyendo el poder del pueblo y el poder del pueblo en la comunicación son los medios pyme, micropyme, comunitarios y cooperativos. Nosotros, desde el Estado, tenemos la responsabilidad de que los medios o microemprendedores que ponen sus únicos $60 mil y se preguntan ¿cambio el auto o pongo una radio, es negocio o no? ¡Me la juego! Y esa persona que se la juega con un medio de comunicación en un pueblo de 15 mil habitantes quizás dice ¡me voy a poner un periódico! y compra computadoras, contrata periodistas, se la juega. Y es ahí donde tiene que estar el Estado, apoyando ese proyecto, porque no va a estar ni Cargil, Monsanto o General Motors”.
“el desafío que tenemos es el de fortalecer el sistema de medios plural y democrático a partir del entramado y la construcción de redes. Para terminar con el monopolio hay que construir un reemplazo del monopolio, ese es el desafío central. Nosotros como militantes vamos a seguir haciendo el esfuerzo para que esto se logre. Debemos apoyar desde nuestra militancia cotidiana a los medios locales y sé que se ven mal o se escuchan más o menos, pero por ejemplo nosotros producimos en La Plata un programa de fútbol en el canal 14 y se ve mal, bajás uno y se ve perfecto. Les agradezco a todo por haber venido y los dejo con el compañero Pablo Llonto, gracias”.
Carlos Quique Álvarez:
“en primer lugar quisiera felicitarlos por este tipo de organización de actividades que son siempre vinculantes y militantes del proyecto nacional y popular. Siguiendo la línea de Federico Martelli, cuanto mayor nosotros podamos ser capaces de que la palabra siga siendo distribuida, nosotros tenemos que ser los garantes, por eso formamos parte de este Estado y este tipo de actividades nos da la pauta de que esa palabra está circulando”.
Los monopolios de la comunicación han entrado en una gran crisis. Lo que hay es una gran crisis del modelo, no comunicacional ni económico, sino de uno político. Como indicó nuestra Presidenta hace 48 hs, este no es un modelo económico sino político y este proyecto político o ley de Servicio Audiovisual responde a un modelo que a su vez encierra paradigmas y las personas que actuamos según un modelo u el otro, actuamos en función de esos paradigmas”.
“Hablemos un poco sobre cuáles son esos paradigmas dentro de los cuales circulan todo el conjunto de prácticas que hacen a la restitución de derechos y la construcción de nuevos derechos”.
El gran paradigma político mundial dividámoslo en dos, en el modelo de dominación y el de liberación. El primero, es el que en la actualidad está haciendo tanto ruido, porque se cae cada vez más y supone que lo más importante para la vida son las cosas, los objetos. Como decía la teoría de la economía política inglesa hacia fines del siglo XVIII o principios del XIX, “las cosas son las que provocan la felicidad de las personas”. Pero como siempre va a ver mayor cantidad de personas que cosas para satisfacerlas, entonces no hay para todos, según esta teoría económica política de dominación. Como no hay para todos hay que eliminar personas y se lo hace a través de la desaparición, asesinatos o bien excluyéndolas”.
“Galeano en las venas abiertas dice el sistema de dominación lo que supone es que como no se puede multiplicar los panes, se elimina comensales, es decir que la base del sistema es la exclusión de las personas, porque las personas no son lo más importante, sino las cosas”. Y de ahí se desprende toda la teoría y la práctica de la comunicación, porque lo que importa no son las personas, insisto, sino en este caso las empresas o los bienes que generan esas empresas”.
“En el paradigma de liberación, al haber sido expropiados nuestros bienes tenemos como principal capital de proyecto a las personas. De ahí que la inclusión sea una necesidad política y un derecho humano, en este caso en nuestro proyecto nacional y popular”.
Gabriel Katopodis
“Recién le decía a Federico, que más que grandes discursos me parece que es importante dialogar, compartir qué visión y perspectiva y desde qué espacio y lugar estamos trabajando y construyendo todos los días un paso más para liberar la palabra, para consolidar esta política que el gobierno nacional planteó y transformó en ley para todos los argentinos. Es una ley que interpeló a todos como sociedad y a cada uno lo atravesó por algún lado diferente; es una ley que generó la posibilidad y oportunidad de sentirnos protagonistas de lo que está pasando. Muchas veces uno tiene la sensación de que el tiempo es tiempo, de que las cosas van ocurriendo y uno solamente las cuenta, las relata, y me parece que en el marco de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual es que hubo una sociedad que se movilizó, que decidió protagonizar un debate y además poner ese tema en la agenda pública, teniendo en cuenta que no estaba instalado porque los argentinos hablábamos de otros temas”.
“A partir de la ley, todo este cambio tiene que ver con una sociedad que empieza a entender al tiempo como parte de la historia, porque como parte de esta historia nos sentimos protagonistas. Tenemos la posibilidad de tener un proyecto político y un sujeto político que se alimentan mutuamente en el marco de la discusión, del diseño, del debate, de la concreción del proyecto de ley a partir de los acuerdos, movilización y organización”.
“La ley es una herramienta de construcción popular porque es un hito en la instancia de su cimentación y tiene la apertura para seguir elaborando prácticas comunicacionales y para que sigamos apropiándonos de instrumentos y herramientas de comunicación popular para recuperar voces y capacidad para nuestro pueblo y para organizar todo lo que falta para estar convencidos de que este proceso se está cumpliendo en los términos en que nuestro pueblo lo viene planteando y reclamando”.
“En democracia al enemigo no se lo mata, se lo vence con relato, discusión y también con fuerza, poniendo el cuerpo como se puso en la sanción de la ley y como hay que ponerlo para que esta ley se pueda aplicar en nuestro país”.
Pablo Llonto
“En esta maravilla de universidad para los que somos más veteranos y sabemos la historia de aquí, la buena y la mala, en estos mismos terrenos cuando en los ’90 parecía que esto se terminaba y quién decía que en este mismo lugar donde a los trenes se los llevaba la privatización, apareció la fortaleza para construir una universidad, pensamiento crítico, militancia para que de a poquito vayamos recuperando la San Martín que siempre soñamos. También me pone orgulloso que se estén desarrollando aquí los juicios de la verdad, porque costó mucho, porque era difícil hablar acá del terrorismo de Estado, de las abuelas, de las madres, de los desaparecidos hace unos años atrás. Y hoy en la calle Pueyrredón, San Martín tiene un lugar nuevo para llevar a cabo los juicios por delitos de lesa humanidad, un lugar único en Argentina y que se ganó por la pelea de los organismos de derechos humanos, del municipio y de distintos sectores del Estado. Ayer fue una jornada espectacularmente emocionante y dolorosamente emocionante. El lugar estuvo lleno de docentes, porque SUTEBA San Martín y Vicente López pusieron todo el empeño para que los docentes sigan de cerca los testimonios de un doloroso caso que es el juicio de las ocho embarazadas. Ayer declaró la nieta recuperada nº 94, Catalina Ovando y los docentes de aquí salieron conmovidas/os y de esta manera se comprometieron con traer a sus alumnos, para que entre todos vayamos conociendo la historia de nuestras compañeras y compañeros detenidos desaparecidos”.
“Vamos a tratar de condenar a los asesinos de aquellos jóvenes y rescatar la memoria de aquellos que con 17 años andaban militando como tantos otros millones de la década del ’60 y ’70”.
“Si bien el motivo de hoy es la palabra o la ley de medios, no quería dejar de contarles esto, para los que viven aquí, para los que estudian aquí; para que sepan cuántas cosas están cambiando también en nuestro territorio y lo mucho que tenemos por hacer, porque este juicio que les cuento no tiene prensa y porque sobretodo los medios hegemónicos, el Grupo Clarín, La Nación y Perfil, los grupos que están en la jaula de los gorilas, de este caso no se van a ocupar y debemos hacer lo posible para que este caso y otros se conozcan.
“A clarín no le importa los juicios por delitos de lesa humanidad y no le importa porque están comprometidos con los represores. Ustedes ya están al tanto del caso de papel prensa y sepan que el caso de los hijos “adoptivos” de Ernestina de Noble, todavía no ha finalizado y sin embargo ha salido de los medios. El resultado dio negativo “parcialmente”, todavía falta cotejar con muchas familias y continúa la investigación, porque aunque el ADN de negativo con estas familias, todavía no están todas las muestras en el banco nacional de datos genéticos. Es por eso que tenemos que seguir peleando, para averiguar más tarde o más temprano, quién son los padres de Felipe y Marcela Noble y si efectivamente son hijos de compañeros detenidos desaparecidos”.
“Yendo a la ley de medios y lo que se viene explicando, hay una sensación en muchos escenarios de que se viene una fecha clave y que todo va a cambiar a partir de diciembre. Pues todo no va a cambiar, sabemos que es una fecha simbólica pero que los cambios se van a lograr a partir de nosotros. La ley de medios es un gran mecanismo para abrir puertas y creo que las puertas están abiertas, pero si no entra nadie, las puertas seguirán abiertas y seguirán Clarín, La Nación, Perfil y los otros medios dominando. No hay otra posibilidad, una creación de medios mágicos, no hay creación de medios si no están ustedes, si no están los jóvenes, las universidades, los sindicatos, etc. pensando en cómo se hace para levantar una canal, una productora o una radio. Si nosotros no hacemos los espacios los ocupará Clarín. Y sabemos los que somos de San Martín, que Clarín se metió hace tiempo con los zonales y son esos juegos los que el monstruo toma para ir ocupándolos. Por eso la ley tiene un peso muy fuerte y que a tres años, lugar donde vamos decimos ‘compañeros, compañeras, sobre todo a los más jóvenes, por favor júntense cuando puedan y empiecen a pensar proyectos y como dijo el compañero Martelli, hablar con el Estado municipal, provincial, nacional para decir ‘somos un grupo de estudiantes, de vecinos, de profesionales, un sindicato que tenemos una idea pero no nos da el cuero para levantar un canal o una radio, necesitamos ayuda, oriéntennos, capacítennos y si pueden dennos ayuda económica, aunque sea un préstamo, porque tenemos que empezar a pelear desde abajo por una construcción de los nuevos medios”.
“Yo soy periodista pero nunca me he cansado de repetir que los periodistas son un gran invento para sacarle la palabra a la gente, porque se naturalizó que en Argentina y en el mundo los que tenían derecho a fijar la agenda de lo que se hablaba y lo que se decía eran los dueños de los medios y los periodistas. ¿Qué quedaba o queda para el pueblo? Si tienen suerte hablar por teléfono a alguna radio y que emboquen en 30 segundos en ese pedacito que le dan al oyente para que hable. ¡Hola soy Juan de San Martín y quería decir que… ¡PIP! y se corta. Las cartas de lectores ¿Cuántas cartas de lectores habrán podido colocar ustedes en los grandes medios de comunicación? Encima con el avisito debajo de ‘no se exceda de 15 líneas’ porque si no hay alguien que es el periodista que se la va a cortar. Ese es el canal de expresión que le dejaron al pueblo, las migajas en un huequito de la carta de lectores y ni que hablar de la TV donde el pueblo prácticamente no existe, o el prende y apaga de TN como me soplan acá que pretende ser la participación popular, o lo que tiene que hacer muchas veces el pueblo para que te manden un móvil de TV o radio y te escuchen: ‘cortar una ruta o una autopista, prender fuego a las gomas y recién ahí, algún gerente o capo de noticias enviará algo cuando diga ‘mandá un móvil que parece que está pasando algo. Ahí recién ese pedacito de pueblo podrá decir que le está ocurriendo. Ese es el periodismo mentiroso que nos metieron y nosotros también como periodistas somos responsables por haberlo tolerado mucho tiempo’”.
“Ya no es tiempo de tolerancia; por suerte desde hace 4 años y medio en Argentina se discuten los medios de comunicación, por suerte hay una gran porción de la sociedad que dejó de creerle ciegamente a los medios y tienen pensamiento crítico y se preguntan por qué me estarán diciendo esto en Clarín y también con mirada crítica sobre los medios estatales y afines al gobierno y diciendo ¿será tan así, lo debo poner en duda? Y eso es buenísimo, porque como sociedad ejercemos algo que antes no podíamos, primero porque fuimos bastante bobos, de creerles a los medios y endiosar a los periodistas”.
“¿Quién diría que Jorge Lanata y tantos otros terminarían donde están hoy? Y nosotros les creíamos, poníamos las manos en el fuego y sin embargo, como dice el viejo dicho ‘por la plata baila el mono’ y ahí están bailando monitos y monitas del periodismo argentino, que antes eran para muchos de nosotros, no digo orgullo, pero representaban algo. Hoy ya no representan nada y quedó claro para quién se vendieron y para quién trabajan, como también quedo bien en claro que los sectores populares tienen que seguir remándola para construir la mayor cantidad de medios para de a poco ir, como dijo Martelli, no sacándoles el micrófono ni la palabra; la diferencia es que antes ellos tenían el micrófono y hoy hay millones de micrófonos y voces de millones de compañeros y compañeras que apuestan por una sociedad más equitativa”.
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