LA NOVELA DE LA RESISTENCIA PERONISTA CON REVISTA 2010 EDICIÓN VERANO

LA NOVELA DE LA RESISTENCIA PERONISTA CON REVISTA 2010 EDICIÓN VERANO

Sobre el autor: Teodoro Boot

Se diría de Teodoro Boot que es un fantasma, un Unabomber literario. Con una obra más que inédita, soterrada y llamado misteriosamente por sus escasos allegados El Oscuro, Boot sigue siendo un partisano, un francotirador entre pajonales y cuchillas. Cada cual puede componer un perfil suyo más o menos nítido, más o menos borroso: Basta poner su nombre en un buscador de Internet para poder acceder a parte de sus intervenciones.
Pero adelantamos aquí que es autor de las novelas “Pureza Étnica”, “No me digas que no”, “Para que nunca amanezca”, “Gracias por dejarnos entrar en su casa” y “La termocópula del doctor Félix”, así como del volumen de cuentos “Crímenes Impunes”; el tratado de autoayuda “Pido a los santos del cielo (Sepa cómo, cuándo y a quién invocar en caso de extrema necesidad)” y el ensayo ”Genealogía de los Dioses”, donde se detallan las relaciones amorosas, parentales y maniacas de las deidades del panteón helénico.
Periodista más por ocasión que por vocación, colaboró con los mensuarios “Reconquista”, “El porteño” y “Lezama”. En la actualidad se desempeña como columnista de la revista digital www.revista-zoom.com.ar

Reseña de "Esperenme que ya vuelvo"

Todo un mundo se resquebrajo cuando en nombre de Cristo aviones militares bombardearon Plaza de Mayo y mataron a centenares de personas. Como quien salpica con agua bendita.

Tres meses después, y ante una nueva sublevación, tras argumentar que con su ida se ahorrarían derramamientos de sangre, el presidente Perón se asiló en una cañonera paraguaya. Aunque quién usurpo su lugar proclamó que no habría "vencedores ni vencidos", Caín había ganado la partida.

Aquel mundo termino de hacerse añicos nueve meses más tarde, cuando torvos dictadores asesinaron a los participes activos y pasivos de una rebelión tan anunciada cómo incruenta, incluyendo a su jefe, quien se les entrego mansamente con la esperanza de que su sacrificio cesara la masacre.

En ese breve periodo (en el que se incubo el huevo de la serpiente del moderno Terrorismo de Estado que haría eclosión veinte anos después) se desarrolla la acción de “Espérenme que ya vuelvo”. Protagonizada por tipos tan comunes y entrañables como De Santis y Friedman y por otros personajes francamente inverosímiles pero tan reales como el “capitán Gandhi” y el "hermano Daniel". Ver para creer.

El autor, que asistió al crepitar de aquellas hogueras, con azorados ojos de niño, reconstruye los comienzos resistentes en la senda que abrieran el Soriano de “No habré Mas penas ni olvidos”; el Vonnegut de “Matadero 5” y el Heller de “Trampa-22”. Con una ironía que, a veces, rompe en risa. Como una carcajada al pie del patíbulo.