Políticas Públicas de Capacitación y Trabajo

Políticas Públicas de Capacitación y Trabajo

 

Coordinado desde el Ministerio de Trabajo de la Nación, y articulado localmente con la Oficina de empleo municipal, el programa es reconocido dentro de las políticas públicas que ya no centran sus objetivos en la asistencia social directa a través del fortalecimiento de comedores o copas de leche, sino que buscan logar niveles de capacitación y recuperar lo se conoce como cultura del trabajo.

En ese sentido Esteban Concia, promotor del programa en La Plata, señaló que “Lo que se busca es trabajar sobre aquellos jóvenes que aun no han terminado el secundario y fomentar el acercamiento al mundo laboral a través de un incentivo para que terminen el ciclo secundario” y explicó que además “Se instrumentan cursos de introducción a cuestiones vinculadas con los derechos laborales, seguridad e higiene, manejo de PC e Internet, en lo que se conoce como POI (Proceso de Orientación e Inducción al Mundo del Trabajo); este curso dura dos meses y medio y en La Plata ya se está realizando”.

“Con esta herramienta en la que ya se encuentran relacionados unos 1000 jóvenes y donde se estima unos 3000 mil para comienzos del próximo año, existe la posibilidad concreta de acercar soluciones de gestión para un sector con problemas de inserción laboral; de hecho un 30% de chicos y chicas de 18 a 24 años no trabaja ni estudia, y 2/3 de los puestos de trabajo que obtienen son no registrados” remarcó Concia.

En una segunda etapa, la capacitación, avanza con lo que son los oficios, haciendo hincapié en aquellos que tienen mayor nivel de demanda en la región, buscando gradualmente vincular lo que van aprendiendo los jóvenes con la realidad laboral y productiva concreta.

Para aquellos jóvenes que tengan un perfil vinculado a un nivel de emprendimiento, se establece un financiamiento para arrancar con unidades productivas de trabajo asociado.

Finalmente existen las prácticas calificantes en el ámbito privado y público donde las empresas toman integrantes del programa, y se establece un mecanismo de remuneración mutua entre el programa y la empresa.

En el marco de un país que crece en búsqueda de lograr mayores niveles de integración social esta política revaloriza el rol del sector público en la búsqueda del la vuelta a que lo nuestra identidad reconoce como cultura del trabajo.