En este caso, la demanda se debió, explicaron los dirigentes de la organización kirchnerista, a la suspensión del pago de subsidios destinados a programas juveniles y en rechazo al proyecto de reforma del código de Contravenciones, considerado "de mano dura" por las agrupaciones sociales.
La asociación que reúne a los quinteros de la Región se apostó, a las 10, en 7 y 32. Allí estuvo una hora cortando el tránsito con la intención de continuar la marcha con sus característicos tractores por la avenida 7 hasta la Gobernación. La Policía le impidió a los manifestantes ingresar al casco urbano con los vehículos rurales, por lo emprendieron el recorrido a pie. Hasta el mediodía la principal arteria de la Ciudad y sus calles transversales estuvieron afectadas por la protesta, lo que generó trastornos en el tránsito.
Ya en la puerta de la Gobernación, mientras esperaba ingresar al edificio para presentar en persona los reclamos de la entidad de medieros, el dirigente Néstor Villacorta sintetizó el motivo de la medida de fuerza: "necesitamos que la Provincia cumpla con el pago del refondeo para productores, que son 135 mil pesos que se reparten entre las familias de quinteros y lo van devolviendo una vez que invierten; que restituya la ayuda alimentaria, que hace cinco meses que no la recibimos; y que nos otorguen un aporte para herramientas agrícolas porque en la última tormenta se perdieron muchos implementos".
"COMPROMISOS SOCIALES"
A las 13, la concentración en 6 y 53 se amplió, pues a los horticultores se le sumó una columna de banderas amarillas del Movimiento de Unidad Popular, enrolado en el Frente para la Victoria. El agrupamiento organizó la movilización para "exigir al gobernador Daniel Scioli que cumpla con los compromisos sociales asumidos con organizaciones que trabajan con niñez y adolescencia y que abandone el discurso de mano dura con los jóvenes", según indicó la secretaria nacional de Juventud del Movimiento, Sabrina Sena.
En la movilización del agrupamiento político y social participaron militantes de La Plata, Quilmes, Florencio Varela y Berazategui. "Nos parece terrible que por un lado pretendan bajar la edad de imputabilidad y que por el otro corten los programas de ayuda a los jóvenes. En muchos barrios los chicos se dedican a actividades productivas y recreativas y si eso se termina se corre el riesgo de que estén en la calle y caigan en la delincuencia", añadió la dirigente.